Urbina, una pequeña aldea alavesa en las estribaciones del Gorbeia, sufrió la opresión de la dictadura franquista como el resto del país. En el seno de una de las familias del pueblo nació Iñaki Ormaetxea Antepara, el menor de siete hermanos. La plaza de Urbina narra el despertar político de Iñaki y el de una generación que, sin conocer en propias carnes el franquismo, pronto comprobó que la muerte del dictador no traería necesariamente un nuevo escenario de libertades. Todo estaba atado y bien atado. Una infancia llena de sueños, una adolescencia comprometida con las luchas sociales y estudiantiles, y una juventud entregada al compromiso político hasta sus últimas consecuencias son las claves biográficas que comparten protagonista y autor en esta novela, redactada en primera persona por quien participó de las experiencias y episodios narrados. El retrato de una época y de un ciudadano vasco que deseó un país y un mundo mejor.